El Cairo.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjHHumvpeI8M-8KBIZI7RkwEElcXqQ6T_qJqKLWs58WrQ9OdlG9_9tWj8X02Wnkc8fOiCoopmPGJGBULPHbCDMOglvKxRn8493CcUW27JH51sIHoANmsn8PUDJmm4mRYB7XKeEgDXbeWTA/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+001.jpg)
Desierto de Occidente.
Por delante un terreno llano, largas rectas y pocas referencias que nos sirvan de estímulo visual, por lo que nuestras cabezas deben "aclimatarse" a este nuevo paisaje y evadirse en sus pensamientos en las infinitas rectas.
Abstenerse los que sufran de agorafobia!!!
Olvidamos que hemos dejado atrás la capital y que hasta estas tierras se acercan pocos turistas. Seguimos con ese "escudo defensivo" que nos lleva a dudar de la honestidad de la gente. Pero una vez más los habitantes del desierto nos dan una lección de hospitalidad:
Paramos a tomar algo en lo que parece una tienda-restaurante al borde de la carretera. Una sopa, un té, unos tomates y naranjas para el camino... Preguntamos con cierto temor el precio, pero para nuestro asombro, Asma (la mujer beduina que regenta el lugar) no quiere cobrarnos nada, e insiste en que nos quedemos en su casa. Perseveramos en pagarle, pero renuncia a todos los intentos. Al final, fotos con toda la familia, besos y la promesa de volver a visitarlos.
Rompiendo más estereotipos, mientras andamos en la difícil tarea de buscar una sombra donde refugiarnos en las horas centrales del día, Admed y Aiman nos adelantan en una moto y tras las preguntas de rigor nos ofrecen la mejor de las sombras donde descansar. Esta pareja de ingenieros agrícolas nos llevan a la finca donde trabajan y nos muestran las diferentes plantaciones: naranjos, mandarinos, granados, incluso frondosos árboles de mango en mitad de este árido desierto.
¡Cómo no, cargaremos en las alforjas fruta para un par de jornadas!
Los días discurren sin muchos contratiempos y cuando el sol empieza a descender, sólo nos resta la sencilla tarea de buscar un lugar donde pasar la noche. Lo único destacable es que si durante el día pedaleamos a unos agradables ventitantos grados, al ponerse el sol la temperatura cae bruscamente en el desierto. Tocará sacar todo el fondo de armario para abrigarnos.
Las mañanas no son menos frescas y despertamos con siete u ocho grados. Pero en esta parte del planeta, el sol está asegurado y en un par de horas... no necesitamos abrigo.
Las distancias entre las distintas poblaciones son considerables, por lo que debemos avituallarnos de agua y comida para el largo camino.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjSNv0g3GQW-GXPbJyFS43Cm56Mj7n5X1u5RYJHPb_apBVeu_PwkUlD3k4bUun368bE-njYN7QLX9G7pBosTDoC8gzDqNbHUaAuWkKNT1-iXTiSqBYSRSXLeA5gUFDIuNme8dKyEc7kvi8/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+015.jpg)
Jornada a jornada vamos atravesando diferentes tonalidades de roca y arena, conformando lo que llaman desierto negro y desierto blanco.
Lo que no difiere mucho es el espectáculo al ponerse el sol. A pesar de tener luna llena, ésta no resta protagonismo al millón de estrellas que la acompañan.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEggs7G8r3MWPp_xxjSAAyryHCXQTPSjarSbrmL7ziCbGNoGksoTZD-V7cpCLyZ4XTZbVYypkhZcwOFwtRKbcfC09S8jEiOZuI9qVQH6GoFXTBXoMuEOBGoN-cjOzE0INOwWyl-H6T8FxEY/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+019.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjjuOKdNI0JONHt4MeXrbnKz3LymMbnlQobKpW-TTxfVEHJHhFuv2oBeLcR4rOH0c7C9FPs9ROCn8eWeJGTrNAxE4Xr0DexVwlh3y37yi8FdeQjixtkAIF028jVewS4jyThKOFHHwb0TkU/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+022.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjD6JIZB6YV2uTfZ9uNY4hWDUDqS6uwLkSh1dZjZC6MEp7IL95uGj8rpj2w9WsA3ugV_hdjz0yPirwLecq5DE99_jx-VvyFD699lzfchBD4_JHSc6lKJV8J2ihJdy1EJk57uivtHGDTEmA/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+027.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgCmZnxvYmfM7MGpry2FU51WMju2IJrE2wSMp-uPSg-968k-IlgsK0PelgDWJ8sovF2-fI5Ft684AIw89SByVCMBMHQ2gOgamThNMjuHRa2H9jwdAsb3MWIfx9p8reJDWJmdg4aytOxdGU/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+026.jpg)
Al igual que Qars, Balat también conserva en perfecto estado la ciudad antigua, pero a diferencia de la primera, ésta cuenta con algunos moradores.
Después de una semana pedaleando sin aire o con éste a favor, saliendo de Mut el viento sopla fuertemente en contra. Ahora, las interminables rectas toman el calificativo de infinitas. Además, tenemos por delante un par de largas jornadas hasta el siguiente oasis. Por suerte, este inhabitado lugar cuenta con algunos retenes de ambulancieros cada cierta distancia y en uno de ellos nos ofrecerán una merecida ducha y una sala donde pasar la noche.
Alguno podría imaginarse un oasis como ese lugar idílico de palmeras y dunas, pero salvo excepciones, éstos no son más que una polvorienta localidad sin demasiado encanto. Por eso, cuando después de recorrer la última veintena de kilómetros antes de entrar en Kharga, (siendo éstos un continuo vertedero a la espera que las dunas hagan desaparecer tanta basura), no podemos menos que sonreír al leer el cartel de bienvenida:
- Wellcome to Kharga. A clean and beautifull city.
Para más inri, al entrar en la localidad... el rutinario control de policía.
Si hasta ahora éstos habían consistido en preguntarnos nuestro nombre y nacionalidad, cuya respuesta siempre venía acompañada de su admiración por equipos de balonpié que según ellos disfrutamos en España. Ahora con un mayor celo profesional... nuevas preguntas:
- ¿en qué hotel tienen reserva?
- ¿cual es su número de teléfono?...
Normalmente el interrogatorio no debiera de pasar de ahí, pero algo les inquieta.
- Wait a moment!!!
Los segundos se convierten en minutos y aburridos de esperar, preguntamos:
- Any problems???
Parece ser que el oficial de mayor rango opina que sin un hotel al que dirigirse y sin teléfono móvil, este par de despistados ciclista no llegará a buen puerto, e insiste en acompañarnos al hotel.
- Noooo....
Escoltados por un coche oficial con cinco policías a bordo nos persiguen por media ciudad. Tras infructuosos intentos por despistarlos, encontramos un hotelillo que parece ajustarse a nuestro presupuesto. Pero para mi sorpresa, uno de ellos me acompaña en la inspección de la habitación. Compruebo el colchón... comprueba el colchón. Miro si hay agua en el baño... mira si hay agua en el baño.
- Are you going to sleep with me??? - Pregunto.
Sonríe.
Por mi parte, no sé si reír o llorar, pero el cansancio me impide mandarlo a freír espárragos.
Tras comprobar que este par de turistas están a buen recaudo, la patrulla desaparece.
Dos jornadas de fuerte viento en contra hace que nos planteemos el seguir pedaleando los 280 kilómetros de inhóspito desierto que nos separan de Luxor. Además no queremos forzar la maquina. Aurora lleva varios días arrastrando molestias detrás de la rodilla, que le ha derivado a un sospechoso dolor en el talón. Por lo que decidimos parar algún vehículo y dar un salto hasta Luxor.
Luxor
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhuv7XozkUg7tbalHdF9UChQlbhyY89hT9By612xfydeFG-LQi6C_I9dC3UIk76MGR5EdIaHlUQXzPkQeB7Bv_JhEgWv3YXujt9H_OkM6iISwWS_sKpiVw8sHG9WG6Q4AaSf6p74VUj1mc/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+041.jpg)
- Where´re you front????
- Taxi????
- One ride in calessa????
- In falua by de Nile????
- Do you want.... ????????????????????
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhAVQh4jmQpmQHFjg5YoIfChpRDc0R58xof6Zp1Cn-_FvQ5CPWKeLLbhPfJrlwNIWCaWQSLb-GM-KSrHjeZ-9_9b-mELtzOvxrvrTkooRsHSifZaeUL5xR5uqRvCwCPUdAucaB1lIGTrcI/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+036.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhVGdpZNh5v8rAYz9VwfYbUMA43B76yvEXTdqyBNTwkC5Y8mP2tOaMEfNZ44bf4GHgrJUUlIXuExm2KpgQUTtmeUY54iSJTOG6u2mfPbo9XzdNGakEwYpvg2QeZwku9JTeAqzT0Zhq6tI0/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+043.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhkX2u5SaJyVwTh6U60GMLrGh4x55XCfa4DKJJtWuwItxYcimm31qJgBBTyLhXNLcUt1Uk6Y2ui5rk6OItczrUVLEN40XgdmIPd8eJB2lLYVXl6j6EeyInZk4ZSBdizGCb19tpszKbl7cM/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+046.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgr7xofBkZVJtnd2nlXmYyaGJ81_txkhFTS3oC-5wOiNjOQjd_O4F1zOCF5ZR3LE4oD-ifbwcDoamHsuu4JRp-fnK1hhUyUG_T5xvf65n4a7gGecSy2d0ss9JConN9RFOd17l43fUyk-WY/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+047.jpg)
Todo parece prometer unas agradables etapas acompañando el gran río: terreno fácil, temperaturas agradables, verdes campos de cultivo... Pero toda esa tranquilidad se acaba cuando los habitantes de esta región se despiertan.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjq7eQjo9DV_ZyhT4lMgvsYUKEkAsH6OgciugLYDPWae_A7NKiegs7QIpqhb3OXRXsBQHpainVBkUhQ6K8t2-9QgZKgADBg3xHqkA_-LjNqE2mOo69Y2PG_dM5EWRbrgfvn1h4EvFSbCuc/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+049.jpg)
¡Cuánto echamos de menos, aquellas tranquilas jornadas de desierto y sus afables gentes!
Aswan.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHjW-9Vt1A5gyjPcCL9V7EKaqehzjMk_3WtgS-OCvXrvfMmWu0eCzFHMiTjo4A1ZBNIyhxcbsyWekk_FRzsFmywC4q71b6sFOGUOnyjbsGkW7GCtSJ7KmRBB77yA_07Vla_RX4PRFy-AI/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+051.jpg)
Pero una vez más, la misma pesadilla. Imposible pasear sin ser abordados por decenas de incansables buscavidas.
Cinco jornadas por Aswan mientras tramitamos la visa de Sudán, intentando descansar y reponer energía suficiente para disfrutar del siguiente país.
Abu Simbel.
Durante años, la única manera de cruzar a Sudán desde Aswan era tomando el abarrotado ferry semanal, que navegando a través del lago Nasser se dirigía hasta Wadi Halfa. (vease crónica de Gerard)
Parece ser, que la reciente construcción de una carretera en el lado sudanés, permite ahora una ruta por tierra, pudiendo visitar de paso los templos de Abu Simbel.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjj1LcA_9PStVEGHB_KWmL1vpvtz-5as4C1v82rUad3tXY_P4Q_Wuaw_aSXUVUnljFo3NKiCJURtwGawtuh9QuevfNXgJg3YPlx-Jkaql7eoHRmoRbZDhH1MsxWlW6FNccBaHX8X2XIDnc/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+055.jpg)
¡No se permite atravesar la primera presa de Aswan en bicicleta!
Optamos por un plan "b" y tomamos un bus público que se dirige a la población homónima a los templos y llegamos a ésta a la hora que los turistas abandonan el lugar. Toda una suerte, pues disfrutamos de los templos para nosotros solos.
El chico de la cafetería donde pasamos noche, nos comenta que en los buenos tiempos visitaban los templos unas diez mil personas al día. Ahora, tan sólo un centenar se acercan a visitarlo.
Nuestro anfitrión también nos informa de la existencia de un ferry del gobierno que cada mañana cruza el Nasser. De esta manera, en poco más de una hora desembarcamos en la otra orilla y entramos pedaleando en Sudán.
¡Vivan los nubios!
Nunca he entendido el significado de las fronteras. Líneas imaginarias que dividen regiones, pueblos, culturas... Y más en Africa donde éstas se trazaron con tiralíneas.
Pero lo que nos sorprende al cruzar la línea que separa ambos países, son los cambios tan drásticos que notamos (por suerte, a mejor). Tan sólo años atrás, al cruzar de India a Nepal habíamos experimentado algo parecido.
¿podrán realmente las fronteras separar tantas diferencias? Parece como si la gigantesca presa de Aswan retuviera algo más que millones y millones de metros cúbicos de agua, y contuviera a su vez paz y tranquilidad.
En 1964 miles de nubios se vieron obligados a abandonar las tierras que llevaban habitando durante siglos. La construcción de la segunda presa de Aswan y el posterior embalsamiento del Nilo, anegó sus tierras de cultivo para siempre.
Por ello, desde que salimos de Wadi Halfa rodamos por un terreno desértico y desolado, hasta que aguas arriba del embalse las riberas se vuelven fértiles y retorna la vida.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgAoDXfuQbzK30sBAios1h0Rf0mI32akcl-3VUrW88UCRFqh92ASQQnEMkNf0ip9FzF7L5h3MadNAekidQTgRHQwbd9AQwRmPhT84CB0Gj6RM8nrUTCPdl-o4I0fGcG9Daj_G1W-I55gKk/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+065.jpg)
Ante el temor de que la amabilidad de los habitantes de esta aldea nos atrape para siempre... decidimos seguir rumbo en bicicleta.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiQR4SbhkaP003VZnz-orSIC-noDqq_xHfydJ-MXtLZM0kABICmJImzUwAAs6lMh2p8t6EZWvRVi2OQAtnPI2PM-nPdVtOsgPVZcSevowWRhQGdqocj_PS0toZ6w6zPfk4VkhWoUCt2sfs/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+062.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh_3NMjNc_NNopZZcFL_dGKgf18tS8SMYFnaFokEx05FKWQw_7r-JGJV33CmQz1i_nYIjCsqJyEDIbcuzmaHRnm7Ytu_ECcHYEG1iciF3c9d0HRnTBQWNkdTxOOjY91BJfh3-gkKv3TV4Y/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+075.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhHXgI6vrrK6hRvTfmhI7vhAbcRdUgtaWjMhwdhYLPlvj4kfBk8B3Q-_9Yer_h7hs-glyqegEcFGftYjVv1TZIoR9TaBwyF0gQHw8_RQGHsb7z9xJMHblyDqnIeTI_1R6NvgovaWQLp6ak/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+082.jpg)
Un caluroso recibimiento por parte de alumnos y profesores y tras redesayunar con ellos, volvemos a la ruta.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi-6veTRF1l_Rwpsnbs_QeVy4y3yC3tU_42XWdoF1UWWpWiYXHW63uzFxC8gGuPVPllEV1RRbqGuAGh9ru_E_85laQqHQojw6oLDxoG61DzEBstAunYf_fRqIqYe6J_7hyphenhyphenqUZmB_uwYXZs/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+085.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiPHE7oK1yDcDZt3BIukeppgG0cDFhTuc8P9WGdlhKH2D-d5Tl1ZVr4jg2EacezeGpcEZRNyICXmvuwyD6otAvBre9ZrQzR-n7T1AkqO8bYsOo_a9u_1SCQvdE_1Fe4JzGlQOPzJ5X71Qs/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+081.jpg)
Nos despedimos del año en la ciudad de Dongola y con la entrada del nuevo año cogemos de nuevo la bici y seguimos hacia el Sur.
Al-Khandaq.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjW4Xjh878Vhu-6IfM59o3iLhjYnzmVKhONZG6_IK-GskMqc7iiPVY1rhTljY2rZMpE0DOJb-jRTko_jpmWxcXqQNCAIXgUkU2MeLhJezCMgsay-Qs6yE5TtuKg3S6856WVa1TED-DWgfs/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+098.jpg)
Al igual que en otras partes del país, muchos habitantes de esta zona han emigrado a Khartum en busca de trabajo, pero estos días vuelven a visitar sus pueblos y sus familias. Además son días de festejos y celebración.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEh0Qucv5jpXlV9b_eSvtaU7wsgiXcO5hWuV8EgYOTmt8HBoJknorXiewWmzsqUSUJmWMkpnSsbxqdqDVGULbvUt7nAc6TGW4Rw78fEfAQpgC6qH10DS5oPS-vao9v0gd4qcUlJmbZmvZmo/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+091.jpg)
Mientras tanto a nuestros oídos llegan alegres ritmos provenientes de la música que emana de unos enormes altavoces. Y alrededor de éstos, danzan gentes cuyos rasgos no habíamos visto hasta ahora.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgkr5eg3tHeFrQRP3H6XtElNdB1ogGDQEHfDmwsCiCAr7VB3g7hx0E44PJFWhnzpOPMmVvedAGXnG9NMBejY6WFixW-yIfUfqbo_u8AuJXJHNGjjCT7sAK6D0wOjSrO3PP5qZKoBpNquvg/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+096.jpg)
Y yo no me haré mucho de rogar!!!
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEj7xDS4Bx-FQn5ZjzpTrXYorSVnAV7RlyL7sGTl_mYEz_JjliQ6I52fjT5GbFQZpEwlom5nvYy-d0SdXJu5X5NXK97kzSO_sl2xFcpunJZNz-ObXU5wy03mwZeRT5nZps75lAXeqvqD83U/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+101.jpg)
Incluso cuando se acaba la "verbena", la fiesta continúa a ritmo de tambores y cacerolas.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEi7OUYPd0VG-RmKuCmfoS5NH1vIT1tZeYiCKXt7DoCp5Ek8CwTWHiv34DCpKCwpnIxXRsTcR1pP8RxAHxjGpiLoy_x0A6Oq2BLIQKu13QWnI3oR-VoJ3A2zFxiyniGOEoHRma66ZReNOko/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+100.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhRa4i_DS4h1rGxd7L5541R4EH143i5Lwyvik9o_u5IotjRczMWYWPm-KkVTJdV4NF7jeifusZM34EvkUggWMhHoiJ6sN1HLNk_3hdcC_2PhHAQW6mJPTk08oOk70dl224gANJ0aqOYkL0/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+102.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgBSBdkEbvnMkqI0JiRPMp-F4Pj4opHIn4doPsRLDTVTQ1flE-DDKN-cJ5EILgE3sWWYCAcLl45fK73H11ECt70FvmeGmGjekvvWfKGNJ8kSnrgkK8URF2RgQ9QzfYrXuICyDMUkQa3ApU/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+103.jpg)
La gran curva del Nilo.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEgtL3MH5PfdWwPJ88bL6PHFyKI3IzDyv7jrjyZNjn_nQ0762oa2lbSVhK1FOmoFejFnJBnxrU8XVaus-aDyhhLBm11qNYOcVf-ZYLqo8IJm52gVrTtLgOxgSy9wPU8gsJWOf2m9VDA7a5A/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+107.jpg)
Hoy en día el burro es más popular que los desgarbados camellos.
También los nómadas, contagiados por las prisas se han pasado a otros medios de transporte.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhb7m386E-MrlKp0zZVegZJsMbWFK76rVgOO1XRHScnvO32TZXbeXO8731yE-vteFPu_9OatwV4HzIB20qDkiB-tqRvkMW34FTBhmt1K2pATpL9-3RDgmDJ0OwiVEkPjFTy_zGHrLy7PYY/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+109.jpg)
Tratando de tomar el camino más corto hacia Khartum, nos despedimos por unos días del río y rodaremos por una perfecta linea asfaltada que atraviesa el desierto de Bayuda.
El azul celeste se torna amarillo y una nube de polvo de arena flota a varios metros, reservando los granos más pesados para acariciarnos nuestras piernas. El negro asfalto desaparece y cada vez que nos adelanta un vehículo nos regala una desagradable ducha de arena que exfolia nuestras pantorrillas.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjpFjXTTdmdg2V5S0JuvdiGNEynTj9RaYnBBrxAqQlNvTzasI8WZvi77uFwd_11qSLrFZMXszaBw-1ztaMY15FtEM0sFyhvzrUYTA5e7MtwiEEf4ErnT2AYgm0dA-WvYkWcJaaXQadOKEM/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+116.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiN9wTUl4VkYZTL5m6b91eMAhgIcjwwkJltT0bgUmcuQqr2BkyRnOtmVswRrUQPwHObR6-6yM_SM0I_tSJrTe32aaE2-MSsAoFb7XzWCnS7-GBYH8lVk3yjSx3KVKdrpDm5KwzLi9QFpes/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+118.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiyr0g9YtAtQQjL-KCeRdt-_XBsJXZfp4MzoxWCHNqwGLPwsprss3_i24odYo8Gv9CojKbHtTe6Z2VJydNqE1c_6UFsWkLq-xYJY-1l6y3UGhSS1fxLNYaMZ45QOgSiT9BqbTsNz4zg_K4/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+117.jpg)
Khartum.
Llegamos a la capital la víspera del día de reyes y qué mejor regalo que una buena ducha y unos días de descanso.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhGfRA9RuQCSnNLsWw2Znx1gZLNf-mzb1gfwe5pt4q0ITdO5n7xb25H6T4tCYsehE7EKYFy_OcWZb34JO2iFNcaNNdn7NDZ0BLlKhJes0k4XWS7ImcMsNCU4hch5uNK5npC9-M27VMAktI/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+123.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhekuEOuosduwP1w8JzEafaTEKYINdtyODUYc16hrNDkcmsE8rQz9vAIRhOly871mQ71zc5beG8fPcrXE-G6j2mVh5uU6CazgaI6u7YTiaGWSCMB4isCs88VnaAXEMxk_t8X8r0bERod0A/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+125.jpg)
Y a diferencia de gran parte de los países de Europa, Sudán ha abierto sus puertas a más de doscientos mil desplazados sirios. Esperamos que éstos tengan la oportunidad de volver pronto a sus hogares.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEiSe8gYGOFfDg9dJMv2Yx1MUEGD2PDICjgFZnBFQIkm_LW5WaukumB5rsrcOhGCrcDj1CVkaDGn2mj4YJKV5t_wS-LvzP0PQ1M4J_ceS42ER4ijjBw6emeH2ojJR5XfX5wC3XRypHAC97g/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+127.jpg)
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhqENo_r2P3ioSHj-E8pmoCJdDlRzNWe-lEtdEsFXh0fJYNg_85Ga0ToWrc35ERR4_evlqB8_XXuOhyGxwGew6Wc-wsOo4AZaImZTFKH5BOPsgCQOCmYT57Gu_cnWmqlmA2TpZuxAIW11Y/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+131.jpg)
Shu-kran Sudán.
Península del Sinaí.
Desde Khartum tomamos un avión y en un par de horas "desandamos" lo que nos llevó semanas de pedaleo y a mediados de enero regresamos de nuevo a El Cairo. Nos restan quince días antes de regresar a casa por lo que decidimos visitar la Península del Sinaí.
Tomamos de nuevo un bus para salir de la Capital y sin tan siquiera bajarnos de éste, comprobamos lo que será una constante en este pedazo de tierra entre Africa y Asia. Controles y controles militares y de policía. En algunos de ellos debemos bajar todos los pasajeros y tras alinearse junto con el equipaje de cada uno, serán los perros los encargados de rastrear y cerciorarse que no llevamos nada prohibido.
En Abu Rudeis retomamos de nuevo la ruta y en apenas cuarenta kilómetros de bicicleta, un nuevo control.
- Where´re you going?
- To St. Catherine.
- Impossible, the road is closed.
- Ehhh??? Why???
- This area is very dangerous!!!
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjzfWKk8K-OHPTBMXV3Mw0QGgnwfjw6W7JEGOLJ-P1MaPR4_7ghfnhND30pZ8QIxGEbjZ4bp0t0Qh_mpqHGHETFxYUZHoKWRCePWjU5OtSnJZrz9fc95t4pMgy-aDV6QjO7TIXQYCN9OEo/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+134.jpg)
Habíamos escuchado todo tipo de calificativos para referirse a este megacentro de veraneo, pero avisados como estamos, éstos se quedan cortos para describir lo que vemos: hoteles y resorts con arcos de seguridad a su entrada; policías armados a la entrada de las playas; discotecas; aquaparks; alcohol; precios en libras esterlinas; carteles en cirílico... todo un parque temático de ocio y desenfreno en un país tan tradicional como Egipto.
Dos días serán más que suficientes para sentirnos fuera de lugar y sin demora hacemos las alforjas y escapamos del lugar.
![](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhYhqDuf3qZvVBqnR5lM97ku8TY9ji7A3G3miFju-_bcJmIf7YbkvSGjiLXyOayvjvaHOSQj6NDWDKxZ8EKeDBQnr8jmHuyD0GT0_1j0XVw0sNUmZTXR5hQvB1tDi-Zukq7ANr2Vhe55hs/s1600/ag+Egipto+y+Sud%C3%A1n+138.jpg)
Un abandonado centro de visitantes nos protege de los huracanados vientos que se levantan al atardecer y acompañados de disecados representantes de la fauna local y de trajes típicos beduinos que se menean cual fantasmas con el aire que se cuela por las ventanas rotas, pasamos una ajetreada noche.
Al día siguiente llegamos a Dahab, pero debido a lo complicado que resulta pedalear por las carreteras del Sinaí, decidimos poner fin a la ruta en bicicleta y disfrutar los últimos días de sol y playa.